Con las Navidades a la vuelta de la esquina, ahora es el momento para buscar y decidir regalos para nuestros seres queridos que, además de ser originales, brinden experiencias y muestren el marcado carácter gastronómico y de excelencia que ofrecen nuestros artesanos y elaboradores.
Y donde esta excelencia es visible, es en el universo del dulce.
Al rico panettone
Empezamos esta selección con un dulce que en la última década ha ganado terreno, situándose entre los preferidos por los barceloneses para agasajar las sobremesas más festivas e, incluso, amenizar los días antes de tan señalados ágapes. Este dulce que hemos adoptado como propio es el panettone, una pieza de arte de origen italiano que es un alarde de dominio de la masa y la cocción. El formato tradicional se elabora con una masa brioche suave, esponjosa y sabrosa en forma de cúpula e incorpora fruta confitada y pasas, y muestra un crujiente glaseado.
Ton Cortés, de la panadería Suca’l, se ha erigido este año con el galardón del prestigioso Coppa del Mondo en Milán con su propuesta de panettone tradicional. Todo un hito, pues este dulce navideño está considerado como la catedral, por su complejidad, y Cortés es el primer maestro no italiano en ganar este premio. Ahora bien, si se le pregunta a Cortés por el secreto, te esbozará una sonrisa y te dirá que mucha pasión y muchas horas de trabajo. Vale la pena probar esta maravilla que cuesta 45 euros el kilo y 27 euros el medio kilo.
Siguiendo con los premios, otro panettone premiado que no puede faltar es el de Mervier Canal: el mejor panettone clásico artesanal 2024, elaborado por el maestro Toni Vera, se puede disfrutar por 40 euros; 750 gramos de profesión con su tradicional fruta confitada (cedro, naranja y pasas golden) que es toda una delicadeza al paladar.
Buscando en el terreno de la innovación del panettone, está el de café de especialidad del maestro pastelero Oriol Carrió en su Pastisseria Carrió, elaborado con el café de especialidad de la tostaduría Tornado, de Granollers. El resultado es un panettone que navega entre el dulce y el ácido de forma suave, con la reconocible textura aireada y muy esponjosa que convierte a este panettone de café y chocolate en protagonista de desayunos, sobremesas y meriendas de los más golosos. Se comercializa en 500 gramos por 24 euros.
En Brunells, por otro lado, ni falta el tradicional ni el de chocolate (ambos por 40 euros el kilo), pero donde dan un paso más allá es en proponer una idea que, de tan sorprendente, es genial: rebanar el panettone lo más fino posible, poner jamón dulce y queso y calentarlo. Voilà el bikittone, una versión de matices dulces de nuestro bikini, que está deliciosa. Para finalizar, no podemos olvidar el panettone de Miquel Saborit, otro artesano considerado como de los mejores del mundo. El viaje hasta Torelló para comprar esta joya en su panadería Més k Pa está más que justificado.
Turrones artesanos: de la tradición a la creación
Aunque el panettone ha conquistado muchos hogares y preferencias, el turrón sigue siendo el rey de las mesas navideñas y un regalo que antes ofrecía el Tió de Nadal y ahora se obsequia como un objeto de consumo y deseo. Hay tantas variedades de turrones como imaginación tengan sus elaboradores: desde los más clásicos de Jijona, almendra, yema quemada o chocolate con almendras, a creaciones absolutamente sorprendentes, en la que los sabores salados se convierten en dulces e incorporan ingredientes como la sal o el maíz.
La Campana es uno de los obradores tradicionales clásicos más interesantes de nuestra ciudad. Regentado por la tercera y cuarta generación, y liderando Maria Dolors Mira, cuando llega la Navidad los escaparates de sus dos tiendas-obrador en la calle Princesa se engalanan con turrones y polvorones de elaboración propia, absolutamente artesanal. Su turrón de Xixona (20,95 euros) es delicioso, pero el que ha reportado más fama a la casa es el de yema quemada (20,95 euros): todas las mañanas, en campana navideña, queman las barras de turrón de yema y lo envuelven en papel encerado para mantener el crujiente y que este conserve el suculento blando interior. Otro imprescindible son sus polvorones, algunos de los cuales han ganado premios internacionales.
Bomboneria Pons, en Sants y en Les Corts, tiene un variado surtido de 36 referencias de turrones de elaboración propia. Este obrador artesanal de bombonería, abierto en 1960 en Sants y de los pocos que aún siguen en activo en España, merece la visita a sus tiendas: traspasar su puerta es como entrar en un túnel del tiempo con parada en la fábrica de chocolate de Willy Wonka. Estanterías y mostradores repletos de creaciones de chocolate, envueltas con celofán o cajitas que parecen de joyería, con sumo mimo, reciben al cliente. Los turrones imprescindibles de la casa son el cubano negro (14,95 euros), el praliné de almendra negra (14,95 euros) o el de trufa al marc de cava (14,95 euros).
Siguiendo con marcas made in Barcelona, Simón Coll es otra a tener en cuenta. Artesanos del chocolate desde 1840, sus turrones de chocolate se definen por estar elaborados con chocolate de origen seleccionado (elaborado en su obrador desde el tostado del cacao al producto final) y frutos secos enteros, de textura firme y delicioso sabor donde los ingredientes se notan y se disfrutan. Los más conocidos son los de chocolate con almendras o avellanas y es posible escoger entre chocolate con leche y chocolate negro (70%). Su precio es de 5,95 euros la barra y se puede comprar online o en su tienda, en Rambla Catalunya (concretamente, en la calle Rosselló, 80).
En este periplo por el mundo turronero, y vistas las propuestas artesanales más clásicas, no pueden faltar los productos de artesanos que toman el turrón como referencia y juegan con la forma, la textura y los sabores. Casa Cacau, el referente en elaboraciones dulces de los hermanos Roca, tiene una propuesta de turrón inspirada en el imaginario del Cascanueces, el cuento escrito por Ernst Theodor Amadeus Hoffmann en el que un juguete cobra vida en Navidad: el turrón recrea la forma del juguete y está elaborado con chocolate negro y nuez, relleno de una cremosa gianduja con galleta crujiente, el centro de ganache de caramelo con naranja, y la parte superior de gianduja aireada con trozos de nueces caramelizadas.
Las nuevas generaciones de creativos en el chocolate han encontrado en Barcelona inspiración y un escaparate a nivel internacional
L’Atelier, el proyecto de los maestros pasteleros Eric Ortuño y Ximena Pastor, siempre atentos a la vanguardia, presentan turrones con deliciosas combinaciones de sabores y formas. Como el Casitas, un turrón de speculoos, caramelo salado y chocolate negro con una delicada forma de casita, ideal para el consumo individual, o el Eixample, que recrea en forma su reconocible cuadrícula, de praliné de macadamia, chocolate dulce y chocolate blanco tostado, ligeramente salado.
El chocolate, estrella indiscutible
No hay universo dulce sin chocolate, la estrella indiscutible. Y no hay Navidades sin que las preciadas elaboraciones realizadas en cacao, en múltiples formas, porcentajes y texturas, sean uno de los regalos más preciados, ideales para todas las edades. Lluc Clusellas, galardonado en 2023 como el Mejor Chocolatero del Mundo en el concurso internacional World Chocolate Masters celebrado en París, es uno de los protagonistas de la escena. Bajo la marca Eukarya comercializa sus creaciones: desde tradicionales rocs de almendra y chocolate negro o de avellana con chocolate con leche, a tableta. Para quienes aún no hayan probado los excepcionales chocolates de Eukarya, el regalo que conquistará corazones es la Selección Eukarya, un pack que contiene los hits de Clusellas: cuatro tabletas de chocolate, esféricos, rocas y crema de cacao y avellanas. Se comercializa en la tienda online de Eukarya por 62 euros y en su tienda física en Vic, donde, como novedad de este año, se podrá disfrutar de su chocolate líquido.
Bubó, otro referente en la creatividad en dulce desde hace decenios en Barcelona, siempre tiene novedades originales, pero en esta ocasión el foco está en disfrutar de la excelencia de Bubó en una caja que contiene los productos en chocolate que más renombre les han reportado, como las tabletas, los bombones y creaciones exclusivas (los Cubombons, en forma de cubo, o los Mendiants, bombones planos con frutos secos). La caja más completa tiene un precio de 120,80 euros, aunque se ofertan otros seis packs con diversos productos y precios más asequibles, disponibles en su tienda online o en su tienda en el Born.
Las nuevas generaciones de creativos en el chocolate han encontrado en Barcelona la inspiración y el escaparate a nivel internacional para mostrar su particular visión del dulce. En Es4sense, Tatiana y Ksenia proponen una apuesta más sentimental, emotiva y sensible, buscando la delicadeza de los detalles y los momentos que se quieren encapsular por Navidad. La selección de sus chocolates es un viaje por los principales centros de elaboración (Venezuela, República Dominicana, Bali, Madagascar, Brasil o Ghana) y buena muestra de la delicadeza y elegancia de sus creaciones es el cofre Haute Couture (51 euros), una selección de 16 bombones entre los cuales se encuentra el bombón finalista a Mejor Bombón de España: naranja sanguina, leche quemada, ganache de frambuesa y chocolate blanco. Todas sus delicias se pueden adquirir en su tienda en Balmes 147 o en su tienda online.
Ahora sí, los árboles de Navidad y las mesas festivas ya podrán contar con una selección de dulces navideños para que disfruten todos los paladares de la familia y amigos. Una selección made in Barcelona de sus principales creadores artesanos, pensada para que ningún bolsillo se quede sin regalo, ningún gourmet se quede sin paladear una dulce Navidad.