Este año no habrá Grinch que nos robe la Navidad. Ni siquiera uno con forma de virus. Y es que con un nombre tan emblemático como impronunciable, la navidad de Käthe Wohlfahrt vuelve por segundo año al número 15 de Banys Nous. El emblema de decoración navideña por excelencia, que nació en 1964 en Baviera, regresa a Barcelona para invadirla con su inabarcable, y esto es literal, espíritu navideño. Y es que tras sus aperturas en Bélgica, Francia, Alemania, Estados Unidos (y así hasta 16 tiendas), la firma de decoración navideña levanta de nuevo la persiana de su particular cuento de Navidad para gozo de todos los amantes de esta época del año.
Una fábrica de fantasía
El empeño de Wilhelm y Käthe Wohlfahrt, el matrimonio fundador de la marca, por querer regalar la misma caja de música con el villancico Noche de Paz a una familia de amigos estadounidenses que estaban fascinados por el adorno, se tornó en misión casi imposible al estar la temporada de Navidad ya casi acabada. Y aunque la historia tiene un final feliz, ya que finalmente la encontraron en una tienda mayorista donde poder comprarla, el matrimonio tuvo que adquirir diez unidades. Una la regalaron a sus amigos, pero para la venta de las otras nueve Wilhelm y Käthe pasaron de bazar en bazar con sus cajitas, donde se dieron cuenta de que todo el mundo se quedaba fascinado por las cajitas. El espíritu de la Navidad se transformó en una idea de negocio, la de crear bonitos adornos para esta época del año. Y así fue el inicio de Käthe Wohlfahrt, una empresa familiar que ya va por la tercera generación y que, a pesar de su éxito, no ha perdido ni un ápice de su esencia.
“Trabajamos el cristal, madera, estaño… Todos nuestros productos son de primera calidad, realizados con cariño hasta el último detalle. No creo que en ninguna tienda de España se puedan encontrar artículos navideños como estos”, explica Montse Escribano, directora de la tienda Käthe Wohlfahrt en Barcelona. Y es muy posible que tenga razón, ya que inspirados por el mundo de los juguetes tradicionales y la diversidad de la naturaleza, todos estos objetos navideños nacen en el taller que la firma posee en Rothenburg (Alemania), y lo hacen con un mix entre el espíritu contemporáneo y las piezas más tradicionales.
Adiós, Grinch y hola, caganer
Es imposible sentirse impasible una vez dentro de esta tienda que más que un comercio es una atracción navideña, la más grande de España, y que además ha sido construida totalmente de manera artesanal. Cruzar las puertas del número 15 de Banys Nous es lo más parecido a sumergirse en un cuento de Navidad en el que cada capítulo se escribe paseando por calles llenas de magia donde se puede encontrar de todo: más 6.300 artículos dan fe de ello, y un tarareo constante, también.
Y es en pleno corazón de Barcelona donde comienza este paseo navideño donde cada casa representa un pueblo típico de Baviera y muestra por tipologías artículos de decoración realizados por los expertos artesanos y diseñadores que trabajan exclusivamente para la firma. Entre los objetos más deseados, y también más vendidos, se encuentran los fumadores de incienso, cuyo prototipo original fue creado hace más de 20 años por Käthe Wohlfahrt. Y a pesar de que el original era un divertido Papá Noel de madera que echaba humo (aromático, además) por la boca, hoy en día se pueden encontrar numerosas versiones de la pieza más emblemática de la firma alemana.
Para los que quieran optar por otros adornos tradicionales, la caja de música, que fue el origen de la marca, también ocupa un lugar muy especial en la tienda. Y si bien la canción que más suena es la de Noche de Paz, también se pueden encontrar otras opciones con diferentes villancicos navideños.
Y como sentido homenaje a Barcelona, Käthe Wohlfahrt también ha creado este año una serie de piezas exclusivas inspiradas en la ciudad mucho más contemporáneas que los fumadores de incienso o las cajas de música. Entre ellas destacan los diseños gaudinianos, el característico taxi amarillo y negro, el tradicional caganer y hasta la Virgen de Montserrat, perfecta para colgar del árbol de Navidad. Y es que, ¿quién no ha querido tener alguna vez una Moreneta como adorno navideño?
Resulta difícil definir, y decidir, cuál es el factor wow de la tienda, o al menos quedarse con solo uno porque todo en sus 300 metros cuadrados es bastante impresionante, pero su abeto de cuatro metros y medio de altura tiene, sin duda, muchas papeletas para lograrlo. Y es que el árbol es para muchos el verdadero emblema de la Navidad, algo que no olvidan tampoco en Käthe Wohlfahrt, donde se pueden encontrar infinidad de objetos para colgar de sus ramas, algunos de ellos con acabados tan singulares como de pan de jengibre o cubiertos de escarcha, como los característicos muñecos cascanueces.
Calidad, originalidad y artesanía en un lugar como nunca antes habíamos visto y que podemos volver a disfrutar en el centro de Barcelona, carrer dels Banys Nous 15, y en una tienda abierta de lunes a viernes, de 16:00h a 20:00h, y los sábados de 10:00h a 20:00h. La firma tiene 16 tiendas repartidas por Alemania, Francia, Bélgica, Reino Unido y Estados Unidos, además de contar con su propia tienda online y estar presente en diferentes mercados navideños.
