En el complejo hospitalario Vall d’Hebrón se realizarán un conjunto de actuaciones para configurar lo que será el nuevo campus sanitario tras una reordenación y modernización de las actuales instalaciones y la construcción de nuevos equipamientos, con una inversión que superará los 270 millones de euros y que debería finalizar en 2028.
Los primeros proyectos que se abordarán son la construcción de un nuevo edificio, llamado FUL (Edificio de Farmacia, Urgencias y Logístico), que centralizará todas las urgencias, excepto las pediátricas, y que conectará el hospital general con el Hospital de Traumatología, Rehabilitación y Quemados. Se trata de una construcción de 28.732 metros cuadrados con una cubierta ajardinada para favorecer la integración en el entorno verde de Collserola, con una inversión de 90 millones de euros para la que el Departament de Salut ha solicitado fondos FEDER, que no se verá terminada hasta el 2028.
La otra obra de envergadura corresponderá a las nuevas consultas de la Teixonera, que agrupará todos los servicios ambulatorios, excepto los pediátricos, y consultas externas de especialidades, y que se ubicará en el otro lado de la Ronda de Dalt, concretamente sobre las cocheras de la L3 del metro. El edificio de la Teixonera, donde habrá que invertir unos 70 millones de euros, tendrá unos 36.000 metros cuadrados y debería estar listo para 2024.
El conseller de Salud, Josep Maria Argimon, califica la reforma de “ambiciosa” para consolidar Vall d’Hebron como uno de los “buques insignia de la red sanitaria catalana” y porque “Vall d’Hebron es un hospital que no sólo tiene voluntad asistencial, —que la tiene y mucha—, sino que también la tiene de investigación, de docencia y de innovación”, añade.
A pesar de que algunas obras de remodelación de equipamientos ya existentes se iniciaron en 2017, quedaron parados unos proyectos y pospuestos otros debido a la pandemia del coronavirus, según ha reconocido el doctor Alberto Salazar, gerente de Vall d’Hebrón, durante la presentación del plan de reordenación del campus que forman el Hospital Vall d’Hebrón, el VHIR, el Vall d’Hebron Instituto de Oncología (VHIO), el CEEM (Centro de Esclerosis Múltiple de Catalunya) y la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB). Salazar manifestó que el nuevo espacio sanitario se abrirá y se integrará más en la ciudad gracias a la construcción de un gran parque conectado con los barrios vecinos y abierto a la ciudadanía.
Respecto al resto de actuaciones, hasta un total de 22 previstas que sumarán unos 63 millones de euros, se estrenará un nuevo espacio para diagnosticar y controlar las arritmias: 540 m² con tecnología de última generación. En 2022 será el turno del espacio Neonatos, contigo como en casa, un proyecto que transforma 444 m² de la unidad de cuidados medios y básicos de neonatología en doce habitaciones familiares. Y también el próximo año está previsto que entre en funcionamiento la nueva área de Radiofarmacia y el Centro de Simulación Clínica Avanzada, 1.148 metros cuadrados donde profesionales y estudiantes podrán ensayar con herramientas innovadoras y casos clínicos.
En los últimos cuatro años ya se han llevado a cabo determinadas actuaciones de mejora, pero la pandemia paralizó y pospuso varias de las obras previstas
Paralelamente, hay otros proyectos en marcha como la Unidad de Psiquiatría Infantil y de la Adolescencia; la renovación de la segunda y quinta planta de hospitalización pediátrica; las fases cinco y seis de la mejora de las Urgencias actuales; la Unidad de Hospitalización de Oncohematología Pediátrica; del Área Terapéutica de Rehabilitación Infantil y Adolescente; una nueva Área del Ictus, una nueva Área del Corazón; el laboratorio de Anatomía Patológica y el Trauma Center.
Lo que ya está en fase de ejecución es el nuevo edificio de la Investigación de Vall d’Hebron, donde trabajan más de 1.000 investigadores, que costará unos 40 millones de euros, más otros 20 millones destinados a un ciclotrón, que permitirá desarrollar medicina molecular que utiliza los radioisótopos para hacer diagnósticos en vivo y nuevos tratamientos. Se construye sobre los terrenos de la antigua lavandería del Hospital y contará con 16.757 metros cuadrados. Ubicado entre el edificio docente de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) y el Hospital de Traumatología, Rehabilitación y Quemados, el nuevo edificio permitirá realizar investigación disruptiva y de excelencia y acercar aún más la investigación en el ámbito asistencial.
Esto sin tener en cuenta que en los últimos cuatro años ya se ha terminado la adecuación de los equipamientos para las Consultas Externas de Pediatría; el Hospital de Día Polivalente de Adultos y el Hospital de Día Polivalente Pediátrico; las cámaras de hematología de adultos; un nuevo espacio para hacer hemodiálisis; la Sala Ronald McDonald, para acompañar a las familias de los niños hospitalizados; la nueva área de diagnóstico por la imagen pediátrico, y las cuatro primeras fases de la adecuación de las Urgencias actuales, que en un futuro estarán centralizadas en el nuevo Edificio FUL.