La evolución de la planta de Seat de Martorell hacia un centro de producción inteligente y conectada da un paso más. La fábrica ha iniciado la producción de los nuevos Cupra Formentor y Cupra León, dos modelos rediseñados y desarrollados en Martorell que pronto tendrán sus primeras unidades listas para circular. De hecho, la previsión es que la fábrica produzca más de mil vehículos de ambos modelos a diario, y que las primeras unidades empiecen a entregarse durante el tercer trimestre de este año.
La línea de producción de los dos modelos tendrá un impacto en más de 4.000 puestos de trabajo de la planta, un tercio de los aproximadamente 12.000 empleados con los que cuenta actualmente el centro de producción. Producir los nuevos Formentor y León representa para la compañía el inicio de una etapa de Cupra como marca impulsada por el diseño. Tanto es así que los nuevos modelos “son clave para el futuro de la planta de Martorell e impulsarán la expansión de la marca en los mercados globales”, según el CEO de Cupra, Wayne Griffiths.
La producción de los dos modelos ha arrancado en paralelo al proceso de transformación de la fábrica, con la voluntad de integrar tecnologías avanzadas a los procesos estructurales y de fabricación en la planta. La de Martorell es la tercera fábrica en cuanto a volumen de producción del Grupo Volkswagen en Europa, y prevé “seguir creciendo con nuevos modelos, pero también a través de la implantación de tecnología inteligente e inteligencia artificial”, ha destacado el vicepresidente ejecutivo de Producción y Logística de Cupra, Markus Haupt.
La fábrica de Seat se transforma mirando hacia los vehículos eléctricos, con la previsión de producir el Cupra Raval 100% eléctrico en 2025
“Este es un momento clave para la planta de Martorell. Juntos estamos impulsando la transformación de la fábrica para garantizar el lanzamiento de los primeros modelos 100% eléctricos, al tiempo que seguimos produciendo vehículos de combustión y electrificados”, ha avanzado el director de la fábrica, Jose Arreche. Con 2,8 millones de metros cuadrados —el equivalente a 400 campos de fútbol—, la fábrica ha producido desde su inauguración en 1993 más de 12 millones de vehículos de 45 modelos, que se han exportado a 70 países de todo el mundo. Coincidiendo con su 30 aniversario, 2023 fue un año de clave para la planta, en el que aumentó un 21% su producción hasta superar los 443.400 vehículos y durante el que instaló el primer horno de secado de pintura totalmente eléctrico de Grupo Volkswagen.
La electrificación de la fábrica de Seat es parte fundamental del objetivo de la compañía de convertir España en un hub de la movilidad eléctrica en Europa. De hecho, Seat lidera el clúster de la gama de coches eléctricos urbanos de Volkswagen. En este sentido, verá salir de la planta de Martorell en 2025 el Cupra Raval, 100% eléctrico, para que meses después empiece a producirse el Volkswagen ID 2 en la misma planta.
Actualmente, el Cupra Formentor es el vehículo más vendido de la marca. Fue el primer modelo diseñado y desarrollado exclusivamente para Cupra, y está disponible como híbrido enchufable o con nuevos motores de gasolina de altas prestaciones. Junto al Cupra León, la marca ha ampliado su presencia a nivel global, con más de 600.000 unidades entregadas desde el lanzamiento de Cupra en 2018.
Para prepararse para esta nueva etapa y disponer de una nueva línea en la fábrica para coches eléctricos, la compañía trasladará durante este verano a otra línea de montaje en Martorell la producción del Seat Ibiza y del Arona, con el objetivo fijado en una transformación que Seat ha puesto en marcha también a nivel industrial, organizativo y cultural de la compañía.