Mientras hay quienes se van a dormir mirando pisos en Idealista, Antonio Díaz, más conocido como el Mago Pop, dice que él siempre ha preferido buscar para comprar teatros y cines abandonados. Después de adquirir el Teatre Victòria de Barcelona el año antes de la pandemia, el ilusionista de Badia de Vallès ha anunciado que ha decidido sumar otra sala a su cartera, esta vez en Estados Unidos, ubicada en la ciudad de Branson, en el estado de Missouri. “Me puede la ilusión. Hay dos Antonios: el que se deja llevar con el corazón y el que pone todos los números”, ha sostenido Díaz, algo “nerviosillo”, este lunes en el día más importante de su carrera profesional por la presentación de su llegada este agosto a Broadway, un poco eclipsada por su última compra: “está super bien trabajar pero en la vida tienes que tirar confeti”.
El Encore Theatre, rebautizado como Branson Magic Theater, con 2.800 localidades, se convertirá en su base de operaciones al otro lado del Atlántico, desde donde podrá girar a otras ciudades estadounidenses, aprovechando que se encuentra prácticamente en el medio de todo: “Tenemos un plan a largo en Estados Unidos y queremos crecer”. Sin revelar la cifra de inversión que ha supuesto la compra del teatro, López ha explicado que las reformas que se tendrán que hacer serán mínimas porque está como nuevo. Pensado en un principio para acoger convenciones, el teatro se encuentra en lo que llaman “las Vegas del público familiar”, con 10 millones de visitantes al año y más de 50 teatros en la ciudad que programan un centenar de espectáculos al mismo tiempo. Ah, y vecinos como Dolly Parton y Tiger Woods. Hasta los Simpsons le dedican un capítulo.
El Mago Pop y su equipo desembarcarán en el Branson Magic Theater después de Sant Jordi, cuando harán su última función de Nada Es Imposible en el Teatro Victòria, donde ha atraído 2,8 millones de espectadores desde que lo compró en 2019. No estrenarán aún su magia en Misouri y esperarán hasta mayo de 2024, pero su llegada les servirá para conocer cómo funciona ese ecosistema del espectáculo, con un museo dedicado a Titanic y campos de golf, y prepararse para Broadway, “un sueño profesional y vital”.
El mago catalán actuará por primera vez en Nueva York el 17 de agosto de este 2023. Aunque lo haga tres años más tarde de lo previsto antes de la pandemia, seguirá siendo el ilusionista más joven que pisará Broadway —entre otros muchos títulos que no para de acumular—. Durante cinco semanas, un Nada Es Imposible “muy parecido” al que se ha podido ver en España se hará suyo el escenario del Ethel Barrymore Teather, adaptando las bromas a Estados Unidos y traduciendo el espectáculo al inglés. En el escenario que pisará el Mago Pop, también han estado estrellas como Marlon Brando, Katharine Hepburn, Judie Dench, Maggie Smith y Sigourney Weaver. Con más de 1.000 asientos, las entradas están a la venta desde este lunes.
Después de esta primera temporada en Broadway, el Mago Pop volverá a Barcelona en octubre: “El Teatro Victòria es mi casa y yo quiero vivir aquí”. Su idea es estar un par de meses en Nueva York y girar por Estados Unidos, pero siempre volviendo a la capital catalana y su Badia del Vallès, a la que está “muy ligado”. “Siempre tengo miedo, pero me hace una ilusión increíble”, ha explicado el ilusionista que financia, sin socios ni inversores externos, todo su proyecto, con una plantilla de más de 100 personas. Y Díaz, que no pierde nunca la sonrisa de los ojos, se ha acordado cuando hace solo diez años no podía pagar ni al técnico que le acompañaba en los espectáculos, que se veían en foros menos masivos como la cadena local La Xarxa o la Mostra de Igualada.