Con el cambio de Govern en la Generalitat, el Port de Barcelona también sustituye a su actual presidenta, Mercè Conesa, que será relevada por el exconseller de Territori i Sostenibilitat, Damià Calvet. El traspaso se ha formalizado este jueves en la sede de la Autoridad Portuaria, con la participación de los implicados, el vicepresidente del Govern, Jordi Puigneró, y el presidente de Puertos del Estado, Francisco Toledo.
Conesa ha sido la primera presidenta del Port de Barcelona, institución que ha liderado desde 2018, nombrada, precisamente, por Calvet. No ha sido una época fácil, como ha recordado Conesa en su despedida, después de haber afrontado un ciberataque y, especialmente, el impacto de la crisis provocada por la pandemia. La presidenta saliente ha apostado por continuar digitalizando y descarbonizando la operativa del Port en el nuevo mandato, ejes que tienen que garantizar que la infraestructura es resiliente ante situaciones inesperadas como las que ha vivido.
Recogiendo el testigo, Calvet ha agradecido a Conesa el trabajo que se ha hecho entre Port y Govern durante estos tres años. El futuro presidente ha señalado la innovación y la sostenibilidad como líneas directrices de su mandato, continuando los proyectos impulsados por Conesa y afrontando tareas pendientes, como los accesos ferroviarios y el proyecto del Hermitage, que han avanzado, pero todavía se tienen que resolver.
Como apunte final y anécdota profesional, Conesa ha puesto de manifiesto que tanto Puigneró como Calvet trabajaron en su gobierno municipal cuando ella era la alcaldesa de Sant Cugat. “No puedo dejar el Port en mejores manos”, ha concluido. Y les ha puesto deberes: continuar tejiendo alianzas para reforzar el posicionamiento de la infraestructura y avanzar en la igualdad de género.