La fecha prevista para el estreno en Barcelona de T’estimo si he begut era el marzo de 2020. Pero, ¿recuerdan qué pasó? La pandemia del coronavirus irrumpió alrededor del mundo y con ella todo saltó por los aires. No fue una excepción el montaje con el que, desde hacía tiempo, trabajaban tres de las compañías de teatro más importantes del país. El destino, caprichoso como siempre, decidió que aquel no era el momento idóneo para que la obra viera la luz e instó a todos los miembros que la conformaban a esperar hasta el otoño de aquel sonado año para poderla hacer rodar por Catalunya, Baleares y País Valenciano.
¿Se imaginan qué habría pasado si se hubiera estrenado cuando tocaba? Dicen que todo tiene su momento y su lugar. Y que si las cosas no pasan cuando tienen que pasar es porque, quizás, es mejor que no pasen. Un año y siete meses después de lo que estaba previsto, el sábado 9 de octubre de 2021 T’estimo si he begut hizo su primera función en Barcelona y desde entonces lo habitual es agotar las entradas en todas las sesiones.
El estreno oficial en el Teatre Poliorama fue el jueves, 14 de octubre, una fecha especial porque se cumplen 25 años que la compañía 3XTRES lidera su gestión. Este año es todavía una fecha más significativa porque T de Teatre y La Brutal se suman como nuevos socios del espacio escénico de La Rambla.
La obra es, antes de subir el telón, un hito por tres motivos. El primero, porque es la primera vez que Dagoll Dagom, La Brutal y T de Teatre hacen un montaje juntos. El segundo, porque también es la primera vez que Empar Moliner sube al escenario sus relatos. Algunos los ha escrito para la ocasión, otros forman parte de sus libros T’estimo si he begut y Tot això ho faig perquè tinc molta por, galardonados respectivamente con el Premi Mercè Rodoreda y el Premi Lletra d’Or, en 2005. Y el tercero y último motivo, el espectáculo es un hito porque, hoy, es el único musical en catalán de Barcelona.
Es la primera vez que Dagoll Dagom, La Brutal y T de Teatre hacen un montaje juntos
La comedia dirigida por David Selvas explica una serie de historias que tienen como punto de encuentro el Bingo Poliorama. Desde allí, un grupo de divertidas y singulares trabajadoras se convierten en sus narradoras. Algunas de estas historias, dicen, son reales. Otras, son fruto de su imaginación. Pero, como prácticamente todo en la vida, siempre hay una parte de verdad y otra de ficción.
Empar Moliner dice que sus personajes “son muy desgraciados”. Quizá lo dice porque en todos los relatos se ríe de ellos y de su suerte. Y en el fondo, quién sabe, quizá también se ríe de ella misma. Moliner nos presenta historias de todo tipo, un punto trágicas pero también cómicas. Como por ejemplo los padres que van a denunciar a comisaría que a su hijo le hacen bullying en la escuela y acaban exponiéndose como sus principales verdugos. Moliner también dice que sus personajes “no son ni carismáticos, ni agraciados”. Y en eso estamos de acuerdo, porque por encima de todo, lo que son es cotidianos. En ellos, vemos el reflejo de personas que conocemos. Y en otros casos, a quienes reconocemos es a nosotros mismos.
T’estimo si he begut es una caricatura de la vida, de sus contradicciones y de su absurdo. Del amor, del sexo y de las relaciones. A veces lo puedes tener todo, a veces no tienes nada y a veces tienes una cosa, pero quieres otra. Y así en una rueda que no deja de girar y a la cual nosotros denominamos vida y David Selvas Bingo! Y es que no es casual que las historias tengan en común este histórico establecimiento. El mensaje de fondo del espectáculo es que la vida es como un bingo: el destino tiene un buen puñado de números a repartir y a cada uno de nosotros le toca uno distinto. La pregunta es: ¿Tendremos suerte?
“David considera al público inteligente, por eso hace este tipo de humor”, explica Empar Moliner. T’estimo si he begut es una invitación a jugar y tentar a la fortuna. Algunos se irán a casa habiéndolo perdido todo. Otros, solo serán capaces de cantar línea. Y algunos afortunados podrán presumir de haber ganado la partida al destino.
Los actores que dan vida a este particular montaje son Mamen Duch, Marta Pérez, Carme Pla, Ágata Roca, Rosa Gàmiz, Marc Rodríguez, Mercè Martínez y Ernest Villegas. Todos demuestran su calidad artística sobre el escenario. Pero destaca especialmente Mercè Martínez, que desborda su papel y hace una actuación sublime. El músico que pone la banda sonora es Andreu Gallén con 6 canciones compuestas ad hoc para la ocasión, que hacen que salgas del teatro sin poder sacártelas de la cabeza.
La primera alianza entre Dagoll Dagom, La Brutal y T de Teatre aprueba con nota. A pesar de ello, es difícil sobresalir y este caso no es una excepción. A veces le falta ritmo y se echa en falta un humor más picante, atrevido. Pero hacer comedia no es fácil y este es un espectáculo que te hace reír y reflexionar, que no es poca cosa. Personalmente, me quedo con las historias de la feminista Rosa Gàmiz, el hipócrita de Ernest Villegas y su one night stand. Pero también es especialmente bueno el relato que protagonizan Villegas y Martínez y su ridículo, pero entrañable amor. ¿Qué dicen? ¿Les apetece ir al bingo? Tienen tiempo hasta el 23 de enero.
