Werfen alcanza 170 millones de beneficio con sus soluciones de diagnóstico clínico

Las soluciones diagnósticas y de laboratorio de Werfen han llevado a la empresa a facturar 2.184 millones de euros en 2024, un 4% más que el año anterior. Con estas ventas, la multinacional catalana ha reducido su deuda bruta en 256 millones de euros, y ha registrado un beneficio neto de 170 millones de euros, cifra similar a la del año anterior, cuando fue de 169 millones.

En este contexto, la empresa fundada en Barcelona en 1966 ha redoblado su apuesta por el diagnóstico especializado, mientras que ha mantenido su estrategia de aparcar su negocio de distribución de dispositivos médicos. “La venta de medical devices supone una decisión estratégica que nos posiciona como una empresa 100% focalizada y especializada en el diagnóstico in vitro”, ha destacado el CEO de Werfen, Carlos Pascual.

Para acelerar este posicionamiento, Werfen ha destinado 179 millones de euros a I+D en 2o24, un 6% más que el año anterior. Además, el año pasado estuvo marcado por la adquisición de la empresa húngara Omixon para reforzar su línea de negocio de trasplantes, después de que en 2023 comprara también Immucor, especializada en diagnóstico transfusional y de trasplantes.

El pasado ejercicio también estuvo protagonizado por la comercialización de productos lanzados el año anterior. “Con estos lanzamientos reforzamos nuestro propósito de contribuir al avance de la atención al paciente en todo el mundo mediante la innovación en el diagnóstico especializado”, ha destacado Pascual, tras un ejercicio en el que la empresa alcanzó un ebitda de 545 millones de euros, un 6% más que en 2023.

Werfen cerró 2024 no sólo con estos resultados, sino también con un anuncio: la sucesión de Pascual al frente de la empresa tras 37 años en la compañía, con el nombramiento como CEO de Alejandro Risso, actualmente presidente de Diagnósticos Clínicos en Thermo Fisher Scientific. “Estoy sumamente confiado con los próximos años; Werfen es una empresa excepcional, respaldada por una trayectoria financiera sólida y con un futuro prometedor”, ha asegurado Risso, que asumirá el cargo el 1 de mayo.

La compañía tiene actividad directa en 30 países y llega a 100 territorios a través de distribuidores, operando como desarrollador, fabricante y distribuidor de instrumentos de diagnóstico especializado, así como de reactivos relacionados, células de trabajo de automatización y soluciones de gestión de datos para uso principalmente en hospitales y laboratorios clínicos.