La empresa emergente barcelonesa calcula que unas 2.000 personas pasarán por su tienda efímera, en la que se podrán encontrar más de 50 variedades de plantas interiores a precios rebajados
Laia Fernàndez y Sergi Villaubí, los fundadores de Monstera.
Después del éxito de su sorteo en Instagram en el que regalaba plantas para toda la vida, la tienda online Monstera se pasa a la presencialidad este fin de semana con la apertura de una pop-up store en la que venderá más de 50 variedades de plantas interiores a precios rebajados, que se situarán entre los cinco y los quince euros de media, más baratos que en la página web. Entre ellas, habrá las referencias más vendidas de la marca, como la Monstera deliciosa, la Maranta leuconeura y la Plectranthus verticillatus, pero también otras más singulares, como la Syngonium Confetti, la Alocasia Pink Dragon y la Alocasia Black Velvet, que tendrán precios más altos.
Esta startup barcelonesa apuesta por crear tiendas efímeras dos veces al año, tanto en la capital catalana como en Madrid. Con una inversión de unos 15.000 euros, la compañía lo hace con el objetivo de que los clientes puedan ver las plantas que quieren comprar en directo, así como darse a conocer a nuevos compradores, según explica el fundador y consejero delegado de Monstera, Sergi Villaubí. La de este fin de semana ya es la cuarta vez que lo hacen. En ediciones anteriores, se han llegado a organizar colas de hasta dos horas para poder acceder al establecimiento.
Desde Monstera calculan que unas 2.000 personas pasarán por la tienda, que está ubicada en la calle Maria Aguiló 28. La pop-up store está abierta este viernes desde las 16 horas hasta las 20 horas, mientras que el sábado y el domingo lo estará desde las 10 horas hasta las 20 horas.
La empresa emergente opera desde Montgat, en una nave que alquilaron pocos días antes del confinamiento de marzo de 2020. Habían empezado a testear su página web en enero de ese mismo año, pero no fue hasta mayo cuando arrancaron oficialmente con la venta de plantas de interior por Internet, después del parón que les supuso la primera ola. Cuenta con una plantilla de diez personas y prevé facturar más de un millón de euros este año, triplicando los resultados de 2020, en parte gracias a la popularidad que ganaron regalando plantas para toda la vida a dos afortunados.
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