Angostura

Greta Thunberg lloraría

En algunas zonas de la ciudad de Barcelona se está experimentando el método conocido como “puerta a puerta”, que significa que tiras la basura en horarios y días convenidos. Lunes y miércoles, pongamos por caso, orgánica. Siempre suelen ser dos bolsas. Orgánica y vidrio, plásticos y resto… El resto y la orgánica son la madre del cordero. Vivo en una zona donde tenemos este tipo de recogida. Pero en esta zona, la mayoría de viviendas tienen una puerta, a pie de calle, que se puede abrir desde dentro y desde fuera, donde se deja la bolsa hasta que pasan los basureros, para evitar los animales: jabalíes, perros o gatos. También, porque de esta manera, se puede dejar la bolsa un poco antes de la hora de recogida.

La cuestión, si hablamos de una gran ciudad como Barcelona, ​​es si hay o no hay contenedores cerca. Si no los hay, el abuelo no atlético no podrá ir a tirar, a otros barrios menos sostenibles, la bolsa. El trabajador ajetreado, aunque atlético, tampoco se la podrá llevar en el transporte público o en la bicicleta. La solución es, claro, dejar la bolsa en el interior de la casa (en la cocina, si te cabe) hasta que llegue el día D y la hora H. Hay bolsas, como la de los plásticos o la del papel, que pueden esperar sin ofender. La de la orgánica es otra cosa. Y la del resto también si los habitantes de la casa poseen un hijo pequeño.

Si el miércoles usted hace pescado a la sal y sandía de postre, no podrá tirar los restos de orgánica hasta el viernes, y si el calentamiento del planeta va al ritmo que todos conocemos, el jueves tendrá la cocina llena de moscas. Si usted, que ha hecho pescado a la sal con sandía, tiene un hijo pequeño verá que el hijo pequeño hará lo que hacen todos los hijos pequeños, que es contribuir al negocio de los pañales. El pañal es un material fétido, imposible de guardar en casa. Y no se puede sacar al niño a hacer caca, como al perro, y no se puede bajar el material, en el ascensor, para depositarlo en una papelera de la calle (en las papeleras se tira de todo) porque Greta Thunberg  lloraría y los vecinos y el portero, también (por diferentes motivos).

Las soluciones son dos. La primera, que te dejen tirar la orgánica y el resto cada día. La segunda, más drástica, poder tirar al niño un lunes o un miércoles, junto con el pescado y la sandía. El pañal, sobre todo, al día siguiente.

Compartir
Publicado por
Empar Moliner

Artículos recientes

  • Good News Barcelona

El Cercle d’Economia reivindica su papel histórico como espacio de pensamiento crítico

Con casi setenta años de historia, una historia que revisita con el nuevo documental 'El…

1 de julio de 2025
  • Barcelona Startup Week

Por un ecosistema sin fronteras

Un ecosistema nace cuando diferentes formas de vida conectan, interactúan y evolucionan juntas. En el…

1 de julio de 2025
  • Creatividad

Ni petit, ni circo

Tras meses de espera, el Teatre Grec encendió su encanto divino el pasado 26 de…

1 de julio de 2025
  • Barcelona Startup Week

Yolanda Pérez: “Los emprendedores más exitosos saben preguntar y escuchar”

Yolanda Pérez es directora de BStartup y Hub Empresa en Banco Sabadell. También es miembro del consejo…

1 de julio de 2025
  • Good News Barcelona

Hubs, incubadoras y aceleradoras como brújulas de fundadores y dinamizadores del ecosistema

El entramado de instituciones públicas y privadas que persiguen dinamizar el ecosistema emprendedor sigue desarrollándose…

1 de julio de 2025
  • Ecosistema emprendedor

La barcelonesa vLex, nuevo unicornio tras su compra por parte de la canadiense Clio

La gestora Oakley Capital ha vendido la compañía catalana 'legal tech' por unos 850 millones…

1 de julio de 2025