Una conexión estratégica entre Asia y Europa que posiciona a Barcelona en el mapa global del comercio
El vuelo directo entre Barcelona y Tokio parece estar más cerca de materializarse. Su puesta en marcha podría representar el inicio de una nueva etapa para Barcelona como plataforma estratégica entre Asia y Europa, y como ciudad que aspira a posicionarse entre las grandes capitales del retail del siglo XXI.
Ahora que la economía global exige diferenciación, propósito y experiencia de cliente, esta ruta facilitará el intercambio turístico y empresarial, y también, puede convertirse en el eje de un nuevo modelo de desarrollo para nuestra ciudad: un ecosistema retail internacional con identidad mediterránea y mirada global.
Tokio: Excelencia silenciosa, servicio perfecto y futuro comercial
Tokio es mucho más que una gran capital: es una ciudad-escuela. Con más de 200 restaurantes con estrella Michelin (la mayor concentración del mundo) y una red comercial que supera los 150.000 establecimientos, Tokio representa el ecosistema retail más sofisticado del planeta. Aquí, la hospitalidad (omotenashi) es una filosofía de vida. La relación entre cliente y proveedor se construye sobre el respeto mutuo, el cuidado por los detalles y una búsqueda constante de la perfección.
En retail, Tokio ha desarrollado modelos pioneros: Flagship stores conceptuales (como los de Muji, Uniqlo, Tsutaya Books o Comme des Garçons), y formatos de conveniencia super optimizados, como los konbini (7-Eleven, Lawson, FamilyMart), que ofrecen más de 3.000 referencias con una gestión del espacio y logística de última generación.
También el retail digital avanzado, donde la frontera entre lo físico y digital se diluye. Ya en 2022, el 89% de los retailers de Tokio integraban algún sistema de compra online con recogida en tienda o viceversa, según la Japan Retailers Association. Distritos especializados como Ginza, Omotesando, Akihabara o Daikanyama, donde el retail se mezcla con cultura, arte, moda y tecnología. Tokio no aspira a deslumbrar con su retail, sino a generar confianza, continuidad y comunidad.
Barcelona: ¿Ciudad de turismo o ciudad de ideas?
Barcelona siempre ha sido una ciudad que recibe visitantes, pero el eje Barcelona-Tokio nos invita a pensar en una Barcelona exportadora de modelo, de talento y de propuestas comerciales.
Ciudades como Nueva York, Tokio o Shanghái lideran el retail global por su consumo y capacidad de generar tendencias, formatos y experiencias que luego se replican en todo el mundo. Barcelona tiene la oportunidad de convertirse en el referente europeo del retail experiencial mediterráneo, gracias a su combinación única de cultura gastronómica y de producto fresco, con activos como La Boqueria, el Mercat de Sant Antoni y el de Santa Caterina; diseño urbano y sensibilidad arquitectónica; emprendimiento en alimentación, moda y estilo de vida, y atractivo turístico y conexión internacional creciente (con más de 15,5 millones de visitantes en 2024 y un gasto de 100 euros diarios).
Retail Tour Barcelona – Tokio: un proyecto estratégico
Inspirado por esta nueva conexión, desde la consultoría CrearMas propongo la creación de un Retail Tour Barcelona–Tokio: un programa de intercambio profesional, institucional y empresarial entre ambas ciudades, que permita mostrar la excelencia del comercio barcelonés a visitantes, inversores y prescriptores japoneses, al tiempo que inspira a nuestros retailers locales con modelos de negocio japoneses centrados en el servicio, la narrativa y la sostenibilidad.
Este tour también facilitaría la creación de vínculos duraderos entre marcas, distribuidores y operadores logísticos, así como el impulso de espacios de showroom en ambas ciudades para marcas emergentes con proyección internacional. Así, Barcelona podría convertirse en el punto de entrada natural para el retail japonés en el sur de Europa, al tiempo que nuestras marcas encuentran en Japón un mercado culto, exigente y de alto valor añadido.
Las cifras acompañan esta visión: Japón fue la cuarta economía mundial en 2024. España es uno de los países europeos preferidos para los turistas japoneses, y Catalunya, un destino clave, con 181.000 visitantes japoneses en 2023, lo que representa aproximadamente el 58 % de los turistas japoneses que llegaron a España.
La ruta Barcelona-Tokio es una oportunidad para que Barcelona vuelva a ser una ciudad donde el retail tenga alma, propósito y proyección internacional
Ahora que la economía necesita diversificar mercados y apostar por el valor añadido, establecer alianzas con ecosistemas como el japonés es una decisión con retorno asegurado. Porque no estamos hablando únicamente de un vuelo. Estamos hablando de una visión de futuro.
Barcelona necesita dejar de entender el turismo como un fin en sí mismo y empezar a verlo como un vehículo para conectar con el mundo, aprender de otros modelos y evolucionar hacia una ciudad donde el comercio no solo venda, sino que inspire, emocione y deje huella.
La —esperamos— futura ruta Barcelona – Tokio no es unidireccional; es un camino de doble sentido: de conocimiento, de oportunidades, de sofisticación y respeto mutuo. Y sobre todo, es una oportunidad para que Barcelona vuelva a ser una ciudad donde el retail tenga alma, propósito y proyección internacional. Una ciudad conectada con el futuro.
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